A sus 35 años, Novak Djokovic está terminando su temporada a lo grande. Clasificado como el octavo mejor jugador del mundo, el serbio no dudó el domingo 20 de noviembre contra el número 2, Casper Ruud, al que derrotó por 7-5 y 6-3 en la final del Masters. Esto le convierte en el jugador más veterano en ganar este torneo, que reúne a los ocho mejores jugadores de la temporada. Con su sexto título, el campeón también igualó el récord de Roger Federer y se llevó el mayor premio jamás ofrecido por la ATP en un torneo: 4,74 millones de dólares (4,58 millones de euros). Le ha costado siete años, desde su última victoria en el Masters de 2015, igualar a Federer.
Djokovic comenzó bien el partido, ganando dos puntos de quiebre en el primer servicio de su oponente. Pero el noruego aguantó y con el 2-1, el serbio empezó a hacer muecas, haciendo temer un nuevo colapso físico, como el que había experimentado en sus dos anteriores partidos contra Medvedev y Fritz.
Tuvo un punto de quiebre en el 4-3, pero no pudo convertirlo.
Sin embargo, como suele suceder, logró levantar su juego en los puntos importantes y cuando tuvo un primer punto de set al servicio de Ruud, fue el noruego quien rompió en el intercambio y dejó que el Djoker se llevara el primer set.
Una temporada frustrante para el serbio
Ante la mirada de Zlatan Ibrahimovic, Djokovic se hizo entonces con el control del partido: logró el primer break del partido para adelantarse 3-1 en el segundo set, jugando un tenis cada vez más superior al de Ruud.
Como joven medio de comunicación independiente, Europa Rup necesita tu ayuda. Apóyenos siguiéndonos y marcándonos como favoritos en Google News. Gracias por su apoyo.